La
vaca gestante debe tener una alimentación adecuada en calidad y cantidad,
siendo necesario en algunos casos suplementarla al final de la preñez. Estas vacas cuando estén
próximas al parto se deben tener cerca de la vivienda, brindándoles refugio que
las proteja de las condiciones climáticas adversas y les brinde un lugar limpio
y como al momento del parto. Se les observara constantemente para buscar
síntomas de parto. Trate de no tener las vacas atadas ni en lugares estrechos.
En el predio se tratad de cumplir
con estas recomendaciones, aunque el paritorio está relativamente retirado de
la casa, se les brinda una vigilancia constante en los momentos previo al
parto. Otro manejo recomendado que se realizan a estas vacas consiste en que en
los dos últimos meses de gestación se evita al máximo actividades que puedan
implicar golpes a los animales como son introducciones en mangas o baños de inmersión
A las vacas gestantes se les
realizan actividades sanitarias necesarias, poniendo mucho cuidado con las contraindicaciones
de la droga veterinaria y muy especialmente en los purgantes, los cuales deben
ser indicados para vacas gestantes.
Diagnostico
El diagnóstico temprano de la gestación en vacas y novillonas es una práctica fundamental para la optimización de la eficiencia reproductiva del hato lechero. En el predio se utiliza el método de palpación rectal, pasados 40 días después de la IA, tiempo prudencial en el cual se puede garantizar la preñez en un alto porcentaje, las novillas que permanecen con el toro son palpadas periódicamente hasta determinar la preñez. Independientemente de cualquiera que sea el método utilizado, hoy sabemos que la identificación temprana de vacas no preñadas después de la inseminación es una estrategia simple que optimiza la eficiencia reproductiva a través de la disminución del intervalo entre inseminaciones.
Recomendaciones a tener en cuenta
Se debe de tratar al máximo de ofrecerles a las vacas gestantes el
descanso necesario para que ellas puedan recuperar su condición corporal
adecuada, destetándolas al menos con dos meses de anterioridad al parto.
Las novillas primerizas se deben acostumbrar a las rutinas de
ordeño, por ellos un mes antes del parto se aconseja ponerlas con las vacas de
ordeño para que se vallan familiarizando.
Para
realizar todos estos procedimientos de cuidado de la hembra gestante se tiene
en cuenta la fecha prevista de parto calculada en un promedio de 283 días, y
teniendo muy en cuenta los síntomas que muestre la vaca
Gracias por compartimos este tipo de información para nosotros que estamos un poco novatos en este campo saludes desde Colombia.
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